Creemos en la colaboración, la co-creación, la participación y la creación de comunidad para enfrentar los desafíos económicos, tecnológicos, ambientales, sociales y culturales del cambiante e impredecible mundo actual.
Afirmamos que el espíritu emprendedor y el talento bajo la visión de preservación del capital natural será capaz de crear una economía basada en la innovación y la tecnología digital que ponga en el centro el medio ambiente y sea capaz de generar mayor bienestar al ser humano.
Consideramos que el Fab Lab es el mejor soporte infraestructural para la innovación. Para ello debe ser un lugar abierto, de fácil acceso (incluso inmediato), amigable, generoso y que respalde a la comunidad dando el soporte necesario a las personas que deseen aportar valor a la sociedad a través de iniciativas y proyectos.
Estimamos que la Economía Circular debe ser el nuevo modelo económico y, por tanto, todos los proyectos y procesos que tengan lugar en el Fab Lab deben integrar la circularidad. Esto además de hacer del propio Fab Lab un lugar más sostenible, le permite erigirse como ejemplo de circularidad para otros Fab Labs e incluso para otras instituciones, startups y empresas que requieran de tecnología de fabricación digital.
Pensamos que compartir conocimiento es una buena manera de hacer crecer a las personas a nivel personal y profesional y que esto siempre revierte positivamente en la sociedad.